Por Fernando Rodríguez de La Nueva.
Las chicas de 9 de Julio cantando y saltando contrastaba con el ánimo de las jugadoras de Estudiantes, después del 63-50 -mentiroso- en el primer partido de la serie final -al mejor de tres- de Primera Femenino, disputado en cancha de Villa Mitre.
Detrás de ese festejo estaba la importancia del triunfo, el valor de cortarle el invicto (11 partidos) al albo y la forma en la que lo logró 9 de Julio, llegando a sacar 28 puntos de luz, en el cierre del tercer cuarto: 53-25.
Por nivel del rival e instancia, acaso haya sido la producción más significa del equipo que orienta Julián Turcato, arrancando con un 11-0 y recibiendo los primeros puntos recién en 6m05 (11-2), después que Estudiantes lanzara 0-8 en dobles y 0-2 en triples.
9 de Julio empezó a ganar el partido desde el inicio, con una combinación defensiva táctica y actitudinal que frenó cualquier intento del albo.
Con Ileana Corvalán pegada a Ailín Larrosa el visitante dejó a su rival sin posibilidades de generar juego y limitado en el goleo.
Esa asignación fue el primer eslabón de una cadena defensiva que cortó el circuito del albo.
Siempre atentas a saltar a las ayudas, contener los rompimientos, doblar al balón y plantarse en la pintura fue generando impotencia en Estudiantes que, a partir de los tiros forzados -y cuando no también-, tuvo bajísimos porcentajes en el global (6-27 en triples, 12-46 en dobles y 8-18 en libres) y específicamente en el primer cuarto, con 2-16 en dobles y 0-4 en triples.
El 19-6 del cuarto inicial fue un anuncio de lo que podía suceder.
9 de Julio no bajó la intensidad atrás y adelante tuvo respuestas efectivas de Corvalán y Emilia Fernández, generándose sus propios tiros o los que le dio el juego aceitado, de pases y ventajas, por lo tanto la diferencia siguió estirándose.
Desgastando y fastidiando a Larrosa (por momentos también la siguió Catalina Arena) impidió alguna reacción colectiva de Estudiantes, que también encontró freno a lo que pudieran motorizar las hermanas Brossard.
El máximo nivel 9 lo alcanzó en el tercer cuarto, cuando llevó el juego hacia la pintura, para que Belén Tombesi jugara 1×1 o absorbiera defensas y se pusiera en modo pasadora. Con gran lectura de juego y diferencia de talla la experimentada jugadora revirtió el balón, asistió y fue Anahel Maurer quien aprovechó castigando con su tiro a distancia, para ganar el tercer cuarto 13-5 (53-25).
Esa diferencia, con el correr de los minutos ya fue decretando el ganador antes del final, los entrenadores echaron mano al banco y el albo ganó el último cuarto 25-10, básicamente porque se le abrió el aro (anotó tres triples), acaso, encontrando en ese pasaje una luz de esperanza para el próximo partido.
Estadísticamente, las más destacadas resultaron Emilia Fernández, que completó 18 puntos (2-7 en triples, 2-6 en dobles y 8-10 en libres), más 9 rebotes y asistencias; Belén Tombesi sumó 11 recobres, 7 asistencias y 8 unidades e Ileana Corvalán sumó 14 puntos (2-3 en t3, 3-4 en t2 y 2-2 en t1).
El segundo partido aún no tiene fecha ni cancha confirmada, ya que el domingo -día programado- no pueden jugar porque el DT de 9 viajará a la Reválida de Eneba.
Se decidirá en los próximos días.
La síntesis:
Estudiantes (50): M. Caputo (7), Juliana Brossard (2), A. Larrosa (12), Josefina Brossard (2), C. Laumann (4), fi; E. Islas (3), J. Rodríguez (16), I. Basual (2), K. Schlenker (2) y L. Hiebaum. DT: Mario Zaccara.
9 de Julio (63): I. Corvalán (14), E. Fernández (18), A. Maurer (11), V. Flores (2), B. Tombesi (8), fi; I. Roldán (2), T. Nieva, C. Arena (4), A. Althabe (2), J. Azaroff, V. Martín y A. Tellez (2). DT: Julián Turcato.
Cuartos: Estudiantes, 6-19; 20-40 y 25-53.
Árbitros: Alejandro Vizcaíno, Juan Gabriel Jaramillo y Camila Robles.
Cancha: Villa Mitre (José Martínez).
Serie: 9 de Julio, 1-0.
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